Semana 7
REMOCIÓN EN MASAS
LOS DESLIZAMIENTOS:
¿Qué son?
Son
desplazamientos de masas de tierra o rocas por una pendiente en forma súbita o
lenta. El deslizamiento o derrumbe, es un fenómeno de la naturaleza que se
define como “el movimiento pendiente abajo, lento o súbito de una ladera,
formado por materiales naturales - roca- suelo, vegetación-o bien de rellenos
artificiales”. Los deslizamientos o derrumbes se presentan sobre todo en la
época lluviosa o durante períodos de actividad sísmica.
Existen
dos tipos de deslizamientos o derrumbes:
Deslizamientos lentos:
Son
aquellos donde la velocidad del movimiento es tan lento que no se percibe. Este
tipo de deslizamiento genera unos pocos centímetros de material al año. Se
identifican por medio de una serie de características marcadas en el terreno.
Deslizamientos rápidos:
Son
aquellos donde la velocidad del movimiento es tal que la caída de todo el
material puede darse en pocos minutos o segundos. Son frecuentes durante las
épocas de lluvias o actividades sísmicas intensas. Como son difíciles de
identificar, ocasionan importantes pérdidas materiales y personales.

¿Por qué ocurren?
Depende
de las siguientes variables: Clase de rocas y suelos; Topografía (lugares
montañosos con pendientes fuertes); Cantidad de lluvia en el área; Actividad
sísmica; Actividad humana (cortes en ladera, falta de canalización de aguas,
etc.); Erosión (por actividad humana y de la naturaleza). Los deslizamientos o
movimientos de masa no son iguales en todos los casos.
¿Cuándo hay mayor peligro de deslizamientos?
Sólo
con estudios específicos se puede determinar la potencialidad por deslizamiento
de una zona determinada y establecer cuáles medidas deben tomarse para evitar o
reducir que el fenómeno ocurra. Sin embargo sabemos que en las temporadas
invernales el peligro aumenta.
HUNDIMIENTOS:
Un
hundimiento de suelo es un movimiento de la superficie terrestre en el que
predomina el sentido vertical descendente y que tiene lugar en áreas aclinales
o de muy baja pendiente. Este movimiento puede ser inducido por distintas
causas y se puede desarrollar con velocidades muy rápidas o muy lentas según
sea el mecanismo que da lugar a tal inestabilidad. Si el movimiento vertical es
lento o muy lento (metros ó centímetros / año) y afecta a una superficie amplia
(km2) con frecuencia se habla de subsidencia. Si el movimiento es muy rápido
(m/s) se suele hablar de colapso.
Las
causas de la subsidencia pueden ser, entre otras:
- La respuesta de los materiales
geológicos ante los esfuerzos tectónicos.
- Las variaciones en el nivel freático o
en el estado de humedad del suelo, por ejemplo como consecuencia de la
explotación de acuíferos.
- La actividad minera subterránea, por
ejemplo tras el abandono de galerías subterráneas.
Por
su parte, las causas de los colapsos implican el fallo de la estructura
geológica que sostiene una porción del terreno bajo el cual existe una cavidad,
lo que puede venir motivado por la disolución de las rocas hasta el límite de
la resistencia de los materiales o el vaciado de acuíferos o en general el
debilitamiento por meteorización física o química de una estructura que alberga
una cavidad. El aprovechamiento de los recursos naturales (actividad minera,
explotación de acuíferos) también puede inducir colapsos.
Los
hundimientos son comunes en donde la roca que existe debajo de la superficie es
piedra caliza, roca de carbonato, tiene capas de sal o son rocas que pueden ser
disueltas naturalmente por la misma circulación del agua subterránea. Al
disolverse la roca, se forman espacios y cavernas subterráneas.
La
apariencia de los hundimientos es impresionante porque la tierra se mantiene
usualmente intacta por cierto tiempo hasta que los espacios adentro de la
tierra subterránea se hacen demasiado grandes para seguir dando suficiente
apoyo a la tierra de la superficie. Si no se cuenta con suficiente apoyo para
la tierra que se encuentra sobre los espacios y cavernas subterráneas, entonces
puede ocurrir un colapso súbito en la tierra.

DERRUMBES:
Los
problemas que presenta la inestabilidad de las laderas de las montañas, son uno
de los peligros naturales más destructivos del planeta.
Derrumbes,
deslizamientos, flujos, reblandecimiento de terrenos y movimientos complejos
ocurren día con día en cualquier parte del mundo de tal forma que cada año las
víctimas y los daños materiales son incalculables. Este tipo de eventos puede
originarse, por terremotos, lluvias intensas, descongelación de la nieve, pero
el principal riesgo son los asentamientos humanos sobre minas de arena, en las
laderas de las montañas que presentan diferentes grados de inclinación o por
vivir al pie de ellas. Los mecanismos básicos de inestabilidad del terreno son:
los caídos o derrumbes, los flujos, deslizamientos y las expansiones o desplazamientos
laterales de los terrenos. Los caídos o derrumbes, son movimientos repentinos
de suelos y fragmentos aislados de rocas que se originan en pendientes abruptas
o acantiladas, por lo que el movimiento es de caída libre, rodando y rebotando
y suelen presentarse mayormente en las carreteras.

DESPRENDIMIENTOS DE
ROCAS:
El
desprendimiento de rocas que se caracteriza por la caída libre de rocas desde
un acantilado. Estas generalmente se acumulan en la base del acantilado
formando una pendiente, lo que impone una amenaza adicional. El desprendimiento
de rocas obviamente constituye un peligro para los seres humanos y la
propiedad, pero en general, impone una amenaza localizada dada su limitada área
de influencia.
SOLIFLUXIÓN:
La
solifluxión (flujo de suelo) consiste en un desplazamiento que afecta a una
masa de fango desplazada sobre un basamento estable. Afecta únicamente a los
materiales arcillosos susceptibles de transformarse en fango por el aumento de
su contenido en agua líquida, lo que provoca un cambio de densidad, del peso y
del volumen, que favorece el desplazamiento a lo largo de la pendiente. Al
transformarse en fango, la propia lámina que se desplaza colmata los huecos y
suaviza las irregularidades de la pendiente, lo que reduce la resistencia del
sustrato al desplazamiento. Cuando se alcanza el límite de fluidez en los
niveles superficiales se establece un plano de discontinuidad hídrica que
funciona como plano de cizalla. La actuación del agua puede producirse por el
empapamiento del material deleznable a causa de infiltraciones, o el
desbordamiento de mantos freáticos, o por la abundancia de las precipitaciones
en una zona.
Existen
diferentes tipos de solifluxión, pero las dividiremos en dos: la generalizada y
la localizada.
La
solifluxión generalizada afecta a toda una ladera y en procesos, normalmente,
lentos y sostenidos a lo largo del tiempo. En esta modalidad distinguimos:
- La solifluxión laminar, que afecta a
una capa muy superficial en un proceso de descenso muy lento.
- La solifluxión subcutánea, que está
dificultada por la existencia de un manto vegetal, y que produce abombamientos
en dicho manto. Estos abombamientos pueden rasgar el tapiz dejando escapar el
fluido fangoso.
- La solifluxión en terracillas, propia de
la grandes pendientes, donde el movimiento se descompone en pequeños
deslizamientos escalonados, expresados en peldaños discontinuos de altitud y
anchura de dimensiones decimétricas. Asemejan a pequeños senderos escalonados.
Esta solifluxión se ve acentuada por las pisadas de los animales mayores, por
lo que esos peldaños, cuando aparecen aislados, también se llaman pisada de
vaca. Frecuentemente las terracillas superiores cabalgan sobre las inferiores.
La
solifluxión localizada se caracteriza en lugares determinados, y también en
momentos concretos, lo que provoca fenómenos catastróficos. En este fenómeno
distinguimos:
- El nicho de solifluxión, zona de
despegue delimitado por un talud semicircular abrupto, con forma de cuchara.
- La colada de solifluxión, o colada de
barro, cuando el material desplazado se extiende a lo largo de la pendiente en
forma de lengua espesa y ondulada. En la parte final adopta bien una forma
cónica plana, si es muy fluido, o bien se acumula el material en la parte
delantera formando caballones.
- Los caballones o lóbulos de
solifluxión, se forman cuando el material se acumula en la parte inferior
formando una pequeña contrapendiente. Los caballones tienen forma convexa y
detrás suyo dejan una depresión donde se acumula agua. En el recorrido de la
lengua fangosa queda una cicatriz con una pendiente marcada. Los caballones
presentan un perfil claramente escalonado.
FLUJOS HIDRÍCOS
ALUVIÓN:
Un
aluvión se define como un río de barro originado tras una fuerte lluvias o
deshielo que ocasionan inundaciones, o también como resultado de un terremoto o
erupción volcánica. Arrastra consigo limo, arena, rocas, entre otras cosas.
Puede viajar, sin aviso, varios kilómetros desde su origen y a una gran
velocidad. En su recorrido puede aumentar de tamaño a medida que arrastra
árboles, basura, e incluso vehículos. Uno de los grandes problemas que
presentan los aluviones es que no se pueden predecir, se desatan sin aviso. Por
lo tanto es importante tomar ciertas precauciones en caso de que un aluvión se
presente. Los aluviones siempre se originan en los mismos lugares, por lo tanto
aquellos lugares deben tener planes de evacuación que al menos tenga dos rutas
de escape. La vegetación debe ser plantada baja en laderas y es importante
construir muros de retención. También podría ser ventajoso construir canales
para dirigir el flujo alrededor de edificios. Una vez desatado el aluvión, es
posible tomar medidas antes que llegue a la zona, pues se escucha un sutil
murmullo que cada vez más comienza a incrementar; comienza a salir agua en la
superficie del suelo; las rejas árboles, postes se mueven sin cesar; aparecen
grietas en las casas; entre otras cosas más. Una vez tomado conciencia de que
el aluvión estalló y en pocos minutos va a llegar a la zona en cuestión se debe
cortar inmediatamente el suministro de gas, luz y agua.

HUAYCOS:
El
Huayco conocido también como “lloclla” o aluvión, es una corriente o flujos muy
rápidos de aguas turbias, lodo, cargados de piedras, maleza y/o árboles que se
desplazan a lo largo de un cauce definido de quebradas o riachuelos. Su causa
directa son las fuertes lluvias o precipitaciones pluviales, que ocurren
durante la temporada lluviosa.

ACCIÓN GEOLÓGICA DE LAS CORRIENTES DE AGUA
Un
río es una corriente de agua continua o perenne, intermitente o no, que
desemboca en el mar, en otro río (afluente), o en un lago (emisor), o se pierde
en el terreno (endorreísmo).
Como
modelador de relieve es el agente geológico más importante.
La
energía de una corriente es su capacidad para realizar un trabajo que
particularmente consiste en la remoción de fragmentos de rocas, de sedimentos
sueltos y de material en solución.
Cuando
una corriente tiene una gran cantidad de energía es un agente de la erosión;
cuando tiene poca energía es agente de depositación y cuando tiene energía
moderada que le permite arrastrar su carga es una corriente graduada.
EROSIÓN:
La
erosión hídrica o erosión fluvial es el proceso de sustracción de masa sólida
al suelo o a la roca de la superficie por un flujo de agua.
a) Erosión en lámina:
El
agua de lluvia al escurrir en forma laminar por la superficie del suelo a
través de las pendientes, arranca una capa fina y uniforme de toda esa
superficie como si fuera una lámina.
Es
la forma más peligrosa de erosión hídrica ya que esta pérdida, al principio es
casi imperceptible sólo será visible con el paso del tiempo cuando se aprecie
erosión en mayor intensidad dando origen a surcos y posteriormente en cárcavas.
b) Arranque hidráulico:
El
agua al presionar contra las grietas de las rocas, comprime el aire que
contienen y rompe a las rocas en grandes bloques. Las márgenes suaves de los
cauces son minadas.
c) Abrasión:
Es
la acción y efecto de desgastar por fricción. La corriente de agua lleva
partículas y fragmentos, que por así decir, son las herramientas para desgastar
las rocas que encuentra y éstas a su vez son también desgastadas.
d) Corrosión o disolución:
La
acción disolvente de las aguas depende del tipo de roca por la que atraviesa la
corriente y de las sustancias que contienen en solución. Las Calizas y Dolomías
son susceptibles a la corrosión por aguas cargadas de CO2, que al reaccionar
con ellas forma ácido carbónico que ataca al CaCO3 de las mencionadas rocas
formando bicarbonato de Calcio, que es sumamente inestable y soluble en el
agua.
TRANSPORTE:
Las
corrientes transportan su carga por rodadura o tracción, solución, suspensión y
flotación.
a) Rodadura o tracción:
Los
fragmentos grandes angulosos o sub angulosos son transportados en el fondo dado
su peso y tamaño son empujados por la corriente y los de menor tamaño son
rodados. Los fragmentos más pequeños pueden moverse dando saltos.
Dependiendo
de la distancia de recorrido, estos fragmentos de roca, terminan siendo de
forma redondeada o sub redondeados, sea cual fuera su tamaño, por esta razón se
les denominan “cantos rodados”.
b) Suspensión:
Por
su tamaño, las partículas del tamaño de la arena, limo y arcilla son
transportados como “carga suspendida” en la corriente; por lo general, estas
partículas son las que le dan el color turbio al agua, constituyen además las
“herramientas” con que pulen y desgastas a las rocas cuando chocan con ellas.
c) Solución:
Por
su capacidad de disolverse ante el agua, las sales minerales, entre otros, son
transportadas en forma de disolución y representa una importante fracción de la
carga total. Cuando el agua es utilizada en la agricultura, le proporciona este
tipo material incrementando la fertilidad del suelo, como: iones Na+, Cl-, K+,
Ca2+
d) Flotación:
Por
la baja densidad de algunos fragmentos de roca, especialmente de origen
volcánico como la piedra pómez y otros, son transportados por el agua en
flotación. También van en esta situación, los materiales orgánicos.
DEPOSITACIÓN:
El
material transportado por la corriente de agua, llega a su destino, cuando las
condiciones que permitieron transportar son invertidas, entonces la corriente
deposita esta carga.
La
depositación ocurre por la ocurrencia de las siguientes situaciones:
·
Declinación
en la pendiente, reducción de la velocidad de la corriente, disminución del
caudal, o por combinación de éstas.
Los
depósitos del material transportado por las corrientes, lo hacen durante su
trayecto o al final del mismo, siguiendo una secuencia estratificada; es decir,
los depositan conforme van llegando, una tras otras, que con el transcurrir del
tiempo, permiten identificarlas como tales, entre otras geoformas aluviales se
presentan a las siguientes:
·
Abanicos
aluviales, terrazas aluviales, deltas aluviales, playones aluviales, islas
aluviales, depósitos aluviales, fondos de valle, entre otros.
FORMACIÓN DE VALLES:
Los
torrentes forman su propio cauce realizando un trabajo de profundización
inicialmente y posteriormente de ensanche. En este ensanchamiento intervienen
muchos procesos: la erosión y socavamiento de las orillas y los flancos con los
consecuentes derrumbes y deslizamientos, descomposición química y transporte de
los materiales, entre otros tipos de remoción.
La
formación de este cauce origina lo que llamamos valle, y sus dimensiones
dependen del caudal, del tipo de roca que atraviesa la corriente y del tiempo
que ha transcurrido en su elaboración.
·
Formación
de terrazas aluviales:
Luego
de un proceso de evolución, que puede durar algunos cientos de años, se forma
las terrazas aluviales.
a) Erosión del sustrato rocoso:
El río:
Primero
labra su cauce sobre la roca de sustrato, sucede la erosión vertical y
encajamiento del canal, gana importancia la erosión areolar en los
interfluvios, con lo que logra rebajar el relieve hasta formar un amplio valle,
y luego rellena el valle formando la llanura aluvial.
b) Erosión de los depósitos aluviales:
El río:
Gana
capacidad erosiva y se encaja en su propia llanura aluvial, puede llegar o no a
atravesar todo el espesor de los depósitos aluviales.
c) Niveles de terraza aluvial:
El río:
Amplía
el valle al ganar importancia la erosión en sus márgenes, la superficie de la
anterior llanura aluvial queda adosada a las márgenes del valle en forma de
escalón o resalte topográfico que constituye la denominada terraza aluvial.
d) Colmatación del valle:
El río:
Colmata
o rellena el valle formando una nueva llanura aluvial, el río se encaja para
dar origen a otro nivel de terraza.
Se
repite el ciclo, esta vez da origen a terrazas más modernas. En esta nueva
llanura aluvial (y por tanto las terrazas que pueda formar) se encuentran a un
nivel topográficamente inferior respecto a las terrazas más antiguas.
Las
terrazas dibujadas aquí, donde el río no ha eliminado por completo el depósito
aluvial anterior, se llaman encajadas. Sin embargo, puede ocurrir que el
río atraviese totalmente el aluvión llegando a encajarse en el sustrato rocoso,
formando las terrazas escalonadas y solapadas.
CICLOS Y TIPOS DE
EROSIÓN:
Los
rasgos morfológicos que se desarrollan en un paisaje dependen fundamentalmente
de tres factores:
La
estructura y composición de las rocas, los procesos geológicos que actúan sobre
éstas, el desarrollo de los agentes de erosión.
Una
corriente nueva pasa durante su desarrollo por una secuencia continua de
cambios morfológicos que constituyen su “Ciclo Erosivo” ó “Ciclo Geomórfico”.
Sus etapas son tres bien definidas: Juventud, Madurez y Senectud. Cabe anotar
que este proceso trae como consecuencia la modificación del paisaje regional
que no siempre avanza con la misma rapidez que el ciclo fluvial; esto es, un
paisaje en juventud puede estar atravesado por corrientes maduras.
a) Juventud fluvial:
Una
corriente joven erosiona activamente; corta hacia abajo predominantemente,
dejando cañones con márgenes acantiladas El perfil típico es en forma de “V”.
El agua llena parcial o totalmente el angoste cauce. Son características la
formación de rápidos y cascadas y el perfil longitudinal es irregular, con
fuertes pendientes.
b) Madurez fluvial:
Esta etapa se caracteriza por el
aumento de la erosión lateral y el inicio de acumulaciones de Planicie de
Inundación en un valle bien definido y amplio. La pendiente es moderada,
eliminándose por consiguiente los rápidos y cascadas. Se produce un equilibrio
entre la erosión y la depositación de sedimentos y las irregularidades desvían
la corriente de lado a lado, originándose los meandros y la depositación de
sedimentos en la llanura de inundación. El paisaje de Madurez Regional se
caracteriza por un gran desarrollo de tributarios y una topografía escabrosa.
c) Senectud fluvial:
A medida que se reduce la pendiente,
la corriente pierde gran parte de su poder rosivo en profundidad, mas no así el
lateral, produciéndose en consecuencia deposición. Este tipo de corrientes se caracteriza por el
gran desarrollo de meandros y una amplia
llanura de inundación en un valle también amplio y poco profundo. Los
meandros se agudizan y adquieren forma de horquilla, que puede ser estrangulada
al romper la corriente el angosto cuello; así se convierte en un lao arqueado
que posteriormente puede convertirse en un pantano. El paisaje regional Senil
se caracteriza por tener pocos tributarios y la no existencia de colinas altas.
El resultado final es la formación de una superficie plana llamada
“Penillanura”.
PERTURBACIONES EN EL CICLO DE EROSIÓN:
El
ciclo normal de erosión puede ser perturbado, en cualquier etapa de su
desarrollo, al intervenir diversos fenómenos naturales, como los siguientes:
-
Diastrofismo, vulcanismo, glaciación, acción eólica, drenaje subterráneo, y
cambios climáticos que pueden acelerar el ciclo o repetir parte de él.
El
diastrofismo al producir un levantamiento del terreno con relación al nivel del
mar, aumenta la pendiente y consecuentemente proporciona mayor energía a la
corriente.
A
este proceso se le denomina rejuvenecimiento y se caracteriza por el inicio de
un nuevo ciclo de erosión.
En
los antiguos valles fluviales, típicamente maduros se observa nuevos cortes en
forma de “V”, dejando generalmente terrazas en ambas márgenes. Si el paisaje es
meandriforme, la corriente rejuvenecida mantendrá el patrón produciéndose los
llamados meandros encajados.
ACCIDENTES EN EL CURSO
DE UN RÍO:
El
agua de los ríos discurre de las zonas elevadas a las más bajas, impulsada por
la fuerza de la gravedad. En su caída, el agua arranca y arrastra materiales de
los terrenos por los que pasa. Estos materiales se van depositando en función
de su tamaño y de la corriente del río.
a) Cañones:
Las
corrientes veloces producidas por la fuerte pendiente que corren sobre terrenos
áridos y de roca infrayacente dura, excavan su perfil en forma de un valle estrecho
y profundo con paredes casi verticales a los que se les llama Cañones o
Gargantas. En los ríos del Perú, generalmente en la selva, se les denomina
Pongos. Podemos citar como ejemplos el Cañón del Pato formado por el río Santa
y el Pongo de Manseriche formado por el río Marañón.

b) Cascadas y cataratas:
Las
cascadas son saltos de agua que se producen en el lecho de un río donde existe
un brusco desnivel, o pendiente muy abrupta por una fractura del terreno o
falla geológica. También se deben a la alternancia de materiales duros con
otros menos resistentes.
Cuando
estos saltos de agua tienen un volumen grande se les denomina cataratas.

c) Rápidos:
Son
saltos de agua constituidos por una serie de peldaños por los que el agua corre
con gran rapidez, formando en algunos casos remolinos.
Una
de las formas que se originan los rápidos es debido a que al pie de las
cascadas y cataratas, el agua cae con fuerza, produciendo remolinos que excavan
la base. Se forma así un entrante en la base de la cascada, mientras que en la
parte superior se crea una cornisa. Esta termina por derrumbarse, de forma que
se nivela la cascada y desaparece: en este tramo, el río sigue discurriendo con
mayor velocidad, originando el mencionado rápido.
d) Meandros:
Un
meandro es una curva descrita por el curso de un río cuya sinuosidad es
pronunciada.
Se
distinguen dos tipos de meandros:
Meandros
de Valle (meandros encajados) y Meandros de Llanura Aluvial (de llanura de
inundación).
Se
forman con mayor facilidad en los ríos de las llanuras aluviales con pendiente
muy escasa, dado que los sedimentos suelen depositarse en la parte convexa del
meandro, mientras que en la cóncava, debido a la fuerza centrífuga, predomina
la erosión y el retroceso de la orilla.
e) Marmitas:
Conocidas
también como “marmitas de gigantes”, son huecos casi circulares que se
encuentran en el fondo y en los lados rocosos del cauce de algunos ríos.
Se
inicia con un incipiente pulido que puede deberse a remolinos que da lugar a
pequeñas depresiones superficiales y semimetricas a veces menores de 50 cm de
profundidad y 50 cm de diámetro.
Una
vez formadas continúan agrandándose por acción rotativa del agua y pequeños
fragmentos de roca actuando como “molinos de abrasión natural”. Una vez
alcanzada la profundidad critica, sigue la erosión lateral, desarrollándose
bordes angulosos en las partes altas de los huecos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario